Los ocupantes saquearon la región de Járkiv: automóviles, lavadoras, joyas y hasta salchichas

Como los militares rusos saquearon la región de Járkiv.
Mykola Komarovskyi23 Agosto 2023UA DE EN ES FR IT RU

[Ілюстрація Сергій Приткін]

Gran parte de la región de Járkiv estuvo bajo ocupación desde los primeros días de la invasión rusa a gran escala hasta septiembre de 2022. Durante este tiempo, los militares rusos lograron robar mucho: artículos del hogar, automóviles, maquinaria agrícola e incluso microcircuitos de las computadoras de una institución científica.

Robaban los coches, los usaban, los estrellaban y los abandonaban

Lo más extendido en la provincia de Járkiv fue el extravío de vehículos personales. Olga Myroshnychenko, habitante de Izyum, nos cuenta: “Se llevaron mi coche. Se llevaban todos los coches. Dibujaban letras “Z” y “V”, los usaban y después de chocarlos, los dejaban tirados”. Una vecina de la aldea de Tsyrkuny informó al Grupo de derechos humanos de Járkiv que cuatro soldados rusos se presentaron a su casa y se llevaron su coche. Desgraciadamente, también había casos cuando los rusos asesinaban a los habitantes de la región con tal de apoderarse de sus bienes, como ocurrió el 21 de abril de 2022 en el pueblo de Ruski Tyshky, cuando los soldados rusos mataron a tiros a un hombre de 58 años en su propio garaje.

Los rusos “expropiaron” muchos vehículos cerca de la presa de Pechenigy. Por esta vía los ucranianos se escapaban del territorio ocupado por los rusos hacia territorios libres. Sólo era posible cruzar la represa a pie. Por lo tanto, la gente solía dejar sus coches justo al lado del embalse. Los habitantes de las aldeas cercanas al embalse de Pechenigy relatan que estos vehículos inmediatamente se convertían en trofeos de los merodeadores militares rusos.

Los coches representan el 43% de los robos documentados. Hablamos de al menos 71 vehículos, pero la cifra real es mayor: en algunos casos se denunciaron “robos múltiples” de coches.

En ocasiones, los ocupantes contaban con la ayuda de las personas locales. En Ruska Lozova, el jefe del taller de una empresa local entregó voluntariamente los vehículos de transporte de cargas y pasajeros a los representantes de las fuerzas armadas rusas.

Robo de viviendas: se llevaban todo con camiones

El robo de bienes personales es la segunda categoría más común.

Las viviendas de la urbanización “Udachino”, cerca de la aldea de Ruski Tyshky, fueron saqueadas durante la ocupación. Como se informó, los rusos se apropiaron de todos los electrodomésticos y se llevaron los bienes a la ciudad de Belgorod.

[мародерство, війна, пограбування, мародерство російських військових]

Según la fiscalía regional de Járkiv, los soldados de la 25ª brigada motorizada de las Fuerzas Armadas de Rusia entraron en una de las casas privadas y robaron joyas de oro y plata, un ordenador portátil y una colección de monedas antiguas. Las autoridades policiales lograron identificar a los culpables a los que informaron, en ausencia, de su presunto delito.

"Se llevaban todo: frigoríficos, lavadoras, muebles, bañeras, camas, herramientas del garaje. Los vecinos dicen que dos coches Kamaz los alcanzaron y se llevaron todo lo que pudieron”, cuenta Serhiy Serdyuk, residente de Ruski Tyshky. “Aquí clasificaban las lavadoras robadas y las sacaban con camiones Kamaz”. Clasificaban en su patio las lavadoras antes de enviarlas a Rusia.

Una habitante de Izyum, Olena, describe las acciones de los rusos así: “A mi marido le quitaron el teléfono, de la casa se llevaron el portátil y la televisión plasma. Todo lo que les gustaba lo metían en la maleta. Hasta los cubiertos de la cocina. Es ridículo... Mi marido quedó vivo, no lo tocaron”. Desgraciadamente, los ocupantes mataron al marido de Olena Grebenyuk después: lo encontraron muerto con un tiro en la cabeza.

En dos casos registrados, los rusos utilizaron dispositivos robados sin cerrar las cuentas virtuales de sus titulares, lo que permitía rastrear las acciones de los criminales.

El primer caso así ocurrió en Tsyrkuny. Una mujer se dirigió a la policía ya que en sus Google Fotos empezó a ver “fotos y vídeos de hombres desconocidos, de uniforme militar, bebiendo y divirtiéndose en la parcela de su casa”.

En el vídeo se puede ver cómo los ocupantes circulan por el asentamiento en un coche robado, “mangoneando” en las casas vecinas y consumiendo alcohol robado.

Un estudiante de derecho informó que sus auriculares inalámbricos, que dejó en su casa en Izyum ocupado, fueron geolocalizados en la ciudad rusa de Severodvinsk a través del aplicativo Find My. En el momento de la conexión, el ladrón o alguien cercano a él se encontraba en una de las cafeterías locales.

En general, es muy extendido que el ejército ruso, al ocupar una localidad, se lleve todos los móviles de los residentes locales, con tal de inspeccionarlos, y nunca los devuelva. En particular, lo confirman los vecinos de la aldea de Kamianka cerca de Izyum.

El robo de baldosas por parte de los soldados rusos plantea suscita más preguntas que respues: el año pasado, los militares de la 93ª Brigada de las Fuerzas Armadas de Ucrania, después de eliminar las unidades enemigas, abrieron una caja de municiones y dentro encontraron las baldosas que los ocupantes intentaron sacar a Rusia.

СтратКом ЗСУ / AFU StratCom СтратКом ВСУ / AFU StratCom

StratCom de las Fuerzas Armadas de Ucrania / AFU StratCom

Empresas y granjas

En Ruski Tyshky, el ejército ruso extravió un arado de disco a un agricultor local, Viktor Simyachko. “El 24 de abril, el Domingo Santo, vinieron con un tractor, engancharon el arado y se marcharon. Sí, mis equipos son viejos, los vieron y no había nada que llevar. Pero el arado, que era nuevo, se lo llevaron”, recuerda el hombre.

En la aldea de Ruska Lozova los invasores robaron una fábrica de embutidos. Como cuenta un vecino, luego repartían las salchichas a los residentes como si fuera ayuda humanitaria. Al mismo tiempo, los rusos estaban sacando los equipamientos de producción.

Los rusos también distribuyeron, como ayuda humanitaria, los cereales robados a los agricultores locales. El comunicado del 16 de junio de 2022, de la municipalidad de Boriv, trata de este tema: "Los ocupantes, que trajeron la destrucción, el despoblación y la muerte a nuestra tierra, ahora están tratando de ganarse la simpatía de la población a expensas de los bienes y propiedades ajenas. Por ejemplo, expropiaron el trigo que quedaba en graneros de algunas granjas y lo distribuyeron entre la gente como si fuera ayuda humanitaria”.

En Vovchansk, un residente local se hizo cómplice y ayudó a los militares rusos a robar almacenes de la empresa “Procesadora de carne de Vovchansk”, y también las instalaciones de la azucarera en la aldea de Bily Kolodyaz en el distrito de Chuguyiv.

En algún caso, los robos de los residentes locales se realizaron de formas bastante particulares. En el pueblo ocupado de Izyum, una empleada de la hacienda local voluntariamente se pasó al lado ruso y empezó a recaudar y administrar los impuestos obligatorios de los habitantes locales en beneficio de las tropas rusas en los territorios temporalmente ocupados de Járkiv. Además, la mujer regularizó la expedición de patentes para realizar las actividades empresariales y económicas.

Tecnología punta

El 2 de abril de 2022, las tropas rusas ocuparon el Observatorio Radioastronómico S. Ya. Braude, un lugar singular. Se quedaron allí durante varios meses. “Robaron muchas cosas: coches, equipos, transformadores, tractores y, por supuesto, computadoras. En general, han “destrozado” muchos equipamientos, porque no sabían ni lo que era. Había cajas de computadores tiradas en el suelo. ¿No entiendo qué buscaban allí dentro?”, se pregunta una de las empleadas, Ganna Belenets, después de la desocupación del observatorio.

"El 90% de las instalaciones han sido destruidas y saqueadas”, cuenta Oleksandr Konovalenko, Académico de la Academia Nacional de Ciencias de Ucrania y vice director científico del Instituto de Radioastronomía. “Los daños ya están calculados: se trata de cientos de millones de dólares.”

El número y la geografía de los crímenes

A la hora de publicación de este material, la base de datos T4P ha registrado 100 casos de robos y extravíos. Al mismo tiempo, hay que entender que este número engloba una cantidad mucho mayor de objetos robados. Por ejemplo, un caso se puede referir al saqueo de un gran número de viviendas en la misma urbanización. O puede tratarse de una denuncia de un vecino referente al robo masivo de coches en su localidad.

Si hablamos de la geografía de los delitos cometidos, la mayoría de los casos de saqueo se registraron en las localidades del distrito de Izyum (67 casos), representando dos tercios del número total. Las localidades de la región de Járkiv se encuentran en segundo lugar (19 casos).

El momento de la entrada de la mayoría de estos casos en la base de datos sucede durante la ocupación o poco después de la desocupación de la región de Járkiv. Sin embargo, el Grupo de derechos humanos de Járkiv hasta hoy sigue encontrando información y registrando las denuncias de los residentes referentes a crímenes cometidos por las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa durante su ocupación de los territorios ucranianos.

Clasificación en el ámbito de derecho internacional

El artículo 8 del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional está dedicado a los crímenes de guerra y establece la responsabilidad por el saqueo de una ciudad o un asentamiento, incluso si es tomado por asalto. Vale la pena señalar que estamos hablando de robo o hurto ordinario de propiedad, es decir, cuando los militares toman propiedad para su uso personal posterior. En cambio, si los bienes se extravían exclusivamente con fines militares, según el mismo artículo, la responsabilidad por la acción no es aplicable.

Compartir el artículo